- Por primera vez se introduce la ubicación de los inmuebles y es posible conocer la revalorización estimada si se reforma y/o mejora su certificación energética en función
del tipo de vivienda y de la influencia de la calidad de la zona en la que se ubique.
¿Cuánto se revaloriza un inmueble si se rehabilita o se mejora su eficiencia energética?
Este interrogante ya tiene respuesta gracias a un nuevo servicio de CoHispania, sociedad de tasación homologada por el Banco de España, que demuestra que la rehabilitación de una vivienda influye de forma positiva en su valor, al igual que una mejora del certificado energético.
La metodología diseñada por CoHispania introduce por primera vez la ubicación de los inmuebles en función de calidades de zona. Ningún estudio publicado hasta la fecha ha tenido
estos factores en cuenta, ya que se han venido relacionando inmuebles en zonas dispares o muy agregadas, lo que puede reflejar resultados inciertos e incoherentes.
España necesita incrementar por cinco su actual ritmo de rehabilitación anual de viviendas, hasta las 120.000 rehabilitaciones de media al año, para lograr que sus edificaciones tengan
cero emisiones en el año 2050. El impacto del presupuesto a largo plazo de la UE y de los fondos de recuperación Next Generation EU podrán acelerar el proceso de integración de la
taxonomía y de la sostenibilidad en el modelo financiero del sector. Esto hace que la financiación vaya a tener una importancia aún mayor de la que ha tenido hasta ahora,
pudiendo impulsar la integración de criterios ESG en nuevos edificios y acelerar la rehabilitación como vector de transición energética.
Por ello, con este nuevo servicio diseñado por CoHispania, es posible conocer la revalorización estimada del inmueble si se reforma y/o mejora su certificación energética en función del tipo de vivienda y de la influencia de la calidad de la zona en la que se ubique. Se trata de una información vital para el dueño del inmueble o la comunidad de propietarios, la entidad financiera en el caso de que la rehabilitación energética deba contar con financiación privada y por las administraciones públicas en caso de subvenciones, así como de
inversores, agentes rehabilitadores y demás actores del sector.